Ayer te vi otra vez, desde la distancia vi tus hermosos ojos azules en los que me ahogaba e inevitablemente mis pensamientos se dirigían a lo misterioso que eres, a porque nadie sabe como eres en realidad, a porque eres diferente cuando estamosjuntos: más tierno, más protector.En mi interior repetía el nombre que te había puesto, si, me da risa incluso a mi.Eres mi rubio-fresa porque tu pelo no tiene otro color que ese.En mi mente siguen aquellos recuerdos de cuando eramos tu y yo solos, contra el mundo.Esas pequeñas discusiones con los malos de la vida y siempre nos defendíamos, todo esto claro, como amigos.Pasó el tiempo y los malos se fueron,bueno no del todo hoy día cuando nos los cruzamos me das miedo, les miras inexpresivo y tu miradaa se hace hielo.Odio que hagas eso y sobre todo, cuando pones esa cara de pasota y chico misterioso que no quiere a nadie y solo habla con los necesarios.Y otra vez lo recuerdo, esas tardes eternas en las que nos hacíamos reir mutuamente pasando de las miradas de los demás hasta que te fuiste, pum, así, de un segundo para otro desapareciste.Te buscaba con la mirada y no te encontraba, en el colegio no hablábamos y ya no me mirabas, me enfadé y no hice nada.NADA.Esa fue la peor decisión.Hoy han pasado un par de años y hace unos mese empezamos ha hablar, miradas robadas, sonrisas furtivas,conversaciones al oído. Llegó el verano y puedo jurar que te vi apenas un par de veces, al igual que los demás.El curso ha vuelto a empezar y los viernes nuestras miradas se vuelven a encontrar y el mundo se detiene, curvas tus labios y me sonríes a quemarropa, apartas la vista y te vas.Hoy día ya se porque me enfadé, me di cuenta de que había empezado a sentir algo por ti y tu también pero tu te acobardaste y me dejaste sola ante el peligro y las preguntas de los demás.Pero esta vez no, ja, va a ser imposible que te escapes porque luchare con uñas y dientes por mis sentimientos, los tuyos, los nuestros.
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